Noto a veces la injusticia de mi voz
el leve pasar de mis palabras aguerridas
tan pronto hirientes
tan pronto lascivas
Y a veces también son mis ojos un castigo
y dictamino sentencia sin haber juzgado
sin dar tiempo a que sus besos
sean pruebas que condenen mi delito
Por eso a veces pienso
que quizás, peor que perderte
sea perderme
q, peor que buscarte
sea poder hallarte
Así que cuando puedo, y sin hacer mucho ruido
lo pienso, lo digo, lo expongo lo escribo
y cuando no, lo pinto
lo dibujo entre tus piernas y estos folios
entre el amor que antes fue odio
y los besos que ahora sólo son promesas
Todo quedará de seguro
como un cielo que pudo ser azul
pero nubes negras nos mojaron de mediocridad
e impidieron que al menos un momento
el mundo dependiera de nuestras manos
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