viernes, 10 de noviembre de 2017

escaleras

He visto a compañeros hablando sobre el dolor
sobre el amor y su ausencia
a veces sobre el amor y la inocencia de poserlo
como si uno pudiera ser dueño por contrato
de tan esquivo sentimiento
he visto a compañeros valientes
hablando sobre los miedos
sobre la suciedad de la vida
sus carencias e injusticias
pero esos, eran lo menos.
Y yo ahora quiero hablar de escaleras
pudiera parecer absurdo
pero tengo una necesidad angustiante
de divagar sobre tan singular estructura
Sin ir más lejos,
El otro día soñé con las escaleras de la casa de la madre de mi ex
no sé a que vino aquello
pero era un sueño con mucha fuerza,
yo estaba allí
como ese ser omnipresente que a veces representamos en los sueños
cuanto egocentrismo siempre, en los sueños y en los despertares
el caso es que yo estaba allí
y veía aquellas escaleras que creía olvidadas
y me ponía a pensar sobre ellas
lo que más recuerdo es que eran estrechas
no era cómodo cruzarte con nadie por ellas
y esto lo dice un tío,
que pesa menos de 60 kilos y mide poco más de 1,60,
sea como fuera tu complexión
aquellas escaleras eran incómodas, y oscuras
no había luz,
por suerte no eran muy largas y aquella travesía
que parecía nocturna y angosta
como perderse por una gruta de una caverna inexplorada
acababa pronto, pasaba de un estado de luz a otro de tinieblas en un breve instante
pero ese lapso tan ínfimo quedaba para ti eternamente.
si me apuráis es como esas relaciones tortuosas
que suelen ser cortas, oscuras, y que cuando consigues escapar de ellas
pareciera que has vuelto a ver la luz
como haber dejado atrás un océano de tinieblas
pero que al final te ha manchado
esas realaciones que siempre dejan huella dentro de tu pecho
como las escaleras del piso de la madre de mi ex, sin ir más lejos.

jueves, 9 de febrero de 2017

Y desaparecer

Ya escribí sobre el desasosiego
ya escribí sobre el miedo,
sobre los desvalidos, sobre las mentiras
Ya escribí sobre mí
siempre sobre mí
alguna vez garabateé
cuatro palabras sobre ti
pero casi siempre yo era el primero
este puto egocentrismo, dicen,
del ser humano, del poeta.
Ahora, años después
de qué sirvió, me pregunto
Nada ha desaparecido
ni los miedos, ni las mentiras
sigo pensando una y otra vez en mí
en mi pecho desvencijado
y en ti, con el vuelo de tu falda
al marchar hacia la nada
años después, has sido lo único
que he sido capaz de hacer desaparecer

viernes, 3 de febrero de 2017

Asuntos del cielo

Asuntos del Cielo

Soy una mala persona
le dijiste nada más conocerla,
Yo también cometí mis errores, 
contestó ella, algo azorada
Pero tú ya habías marcado tus cartas
y ella jugaba con su pelo 
como si tuviera el suspiro de un mar 
enredado entre su piel,
como los dedos de un pianista
danzando en su cabeza

Y a ti ya,
te fascinaba cualquier movimiento
hacía tiempo que habías profesado lealtad 
a la religión de su mirada,
aceptabas sus dogmas
como un talibán enajenado
aquellas estúpidas creencias tuyas
no eran ya sino panfletos mojados
valoraste la opción de pecar, 
una última vez
la opción de perder el norte
como la única salida aceptable
Y así, entre divagaciones y plegarias
la viste marchar por la puerta de aquel café
un manto sagrado sobre el cuello
y un chico guapo en la cintura
A veces, la Teología, es así de sencilla