viernes, 18 de septiembre de 2009

Por la boca vive el pez 1.5

Más o menos. Si el nuevo disco de Fito fuese un programa de ordenador llevaría sin duda este nombre, no sería lo suficientemente nuevo como para cambiárselo, y algo así es lo que le pasa a este Antes de que cuente diez. El trabajo que ha realizado Fito con sus ya mercenarios (y no lo digo en plan despectivo) Fitipaldis, es continuista hasta decir basta. La pregunta sería: ¿Y eso es malo, doctor?; bueno, depende de lo que le pareciese el anterior disco, si te gustó este te gustará, sino te gustó, tranquilo aún hay esperanza. Sí, porque aunque el disco anterior no te entrase (normal, a mi juicio era su peor trabajo tanto en solitario como con Platero) este puede gustarte, porque aunque sigue los mismo patrones es bastante mejor álbum que Por la Boca Vive el Pez. Probablemente sea el disco más rockero que haya hecho Fito (exceptuando, of course, a Platero y Tú), pero "rockero" y "mejor que el anterior" no son sinónimos de bueno. Y es que los dos mejores trabajos de Fito han sido sin duda los más tranquilos (imprescindibles A Puerta Cerrada y Los Sueños Locos), el problema ahora es la perfección con la que suena todo, esa limpieza en el sonido, esas guitarras tan milimétricamente estudias, ese saxo metido con calzador en mil y una canciones, ese cambio de ritmo de la batería, todo todo absolutamente todo está calculado para que suene en el segundo exacto, en el momento preciso, con el tono necesario, y claro eso resta mucha naturalidad. Con las letras pasa absolutamente igual, Fito triunfó con sus letras llenas de contradicciones, y ahora parece que en cada canción debe haber al menos tres o cuatro de estas para que sean válidas, y volvemos a lo mismo, todo suena a algo demasiado prefabricado. Algunas canciones se salen de estos cánones, un gran ejemplo sería Me Acordé de ti, probablemente la mejor canción del disco, aquí sustituímos el saxo por el hammond (muy presente en todo el disco) y se agradece, la versión de La Cabra Mecánica, Todo a Cien se convierte en otro de los puntos álgidos de este disco, aunque seguro que habrá a quien no les guste. En la parte positiva también tenemos Que Necesario es el Rock'n'Roll, con una letra llena de tópicos rockeros (y eso nos suele gustar, porque somos así de cutres) pero que está entre lo mejor musicalmente; por último Que Me Arrastre, es un intento de acercarse a las baladas bluseras de Los Rebeldes, con muy buenas guitarras pero otra vez con ese saxo demasiado presente, y este digamos, lastre que lleva el disco quedá patente en dos canciones, una Catorce Vidas son dos Gatos, para mí de lo peor del disco probablemente segundo single una canción que he escuchado mil veces en otros grupos, y Los Huesos de los Besos, una canción que podría haber supuesto un soplo de aire fresco con ese acordeón sonando al más puro estilo del último single de Dylan, pero donde al final nuestro susodicho saxo vuelve a encontrarse metido por decreto dejando atrás todo lo bueno apuntado anteriormente.

En resumen un disco que supone una actualización de Por la Boca Vive el Pez, y mejora bastante la imagen que nos dejó ese disco, pero que creo que pasará mucho más tiempo en las emisoras de radio que en nuestros reproductores de música o nuestros mp3'ses. Fito quiere hacer rock maduro y tiene dos opciones seguir por este camino y hacer de él un icono del rock mainstream, lo cual le irá bastante bien durante un tiempo, o fijarse en algunos coetáneos suyos (Loquillo, A.Rot, Calamaro, Bunbury) y ser un artista de culto, la opción es fácil, veremos por donde nos sale. Con todo, me alegro mucho lo que le está pasando porque si alguien se merece esto en la música es él. Saludos

No hay comentarios: