lunes, 11 de abril de 2011
En el Río
martes, 5 de abril de 2011
Foo Fighters-Wasting Lights

lunes, 4 de abril de 2011
Nombre Propios

Hace años cuando se hacía de noche
alguien me cantaba sus canciones
y siempre hablaba de cazar estrellas
de coleccionar puestas de sol
y yo, incrédulo, pensaba
en la belleza de la literatura,
pero con el tiempo uno comprende
que todo es mucho más real de lo que creía
todo es tan fácil como no tener que trabajar un sábado
como correr detrás de Jade y Marea
como ver la portada del Marca después de la victoria de Preciado
como despertar a tu lado
como oír un disco de Ryan Adams
como leer un libro de Cortázar
como beber una litrona con la gente que quieres
como coger tu mano en Monfragüe
como llegar a casa y tener la comida hecha
como despertar a tu lado
como un gol en San Mamés
como blasfemar
como la risa de Fátima
como volver a ver a Daniel Day Lewis confesar haber puesto las bombas
como un abrazo de un amigo
como haber descubierto a PeterBagge
como ordenar mis discos de música
como ganar a la Negra aloquesea
como dar las gracias a un dios en el que no crees
por haber creado a los Ramones
como ver caer las dictaduras de tantos hijosdeputas
allá en el continente vecino
como despertar a tu lado
siempre a tu lado
viernes, 1 de abril de 2011
Fabián-Después del Incendio y Otras Cosas Así

Fabián, ese genial leonés de profesión hacedor de canciones, tiene disco nuevo y eso siempre es motivo de enhorabuena para los que amamos esto de la música. Había cierta expectación con lo que pasaría con este tercer disco, ya que el anterior fue bastante bien acogido por crítica y público, aunque por desgracia eso no vaya asociado a altas ventas. El caso es que, ya que Adiós Tormenta fue uno de los discos que mejor sonaron en el 2009, las esperanzas puestas sobre este Después del Incendio y Otras Cosas Así eran altas, y eso puede ser bueno o puede volverse en su contra. Por eso antes de nada querría dejar claro que, desde mi punto de vista, el disco que nos ocupa está, sin lugar a dudas, a la altura de aquel maravilloso Adiós Tormenta.
Enfrentarse a la crítica de un disco de Fabián es complicado, porque se me hace muy difícil asimilarlo a otros grupos para que quien no lo conozca se haga una idea de su música, y por otro lado se me hace difícil expresar lo que el disco transmite sin utilizar constantemente adjetivos como intensidad o belleza. La música de Fabián, me atrevería a decir, es única al menos en la escena estatal, como dirían los americanos Fabián es un singer songwritter o como a mí me gusta decir un hacedor de canciones, quizás un exponente más de esa nueva generación de "cantautores" que están provocando un renacer y una dignificación de un género que probablemente se había quedado algo anquilosado; sin embargo aunque a Fabián se le coloque siempre cerca de P.Moro, M.Tarancón, C.Madrid o A.González; éste se sitúa en otra onda diferente, el juega por libre, no hay ninguna influencia de anteriores cantautores en su música, no hay nada de Calamaro (aunque hiciera una versión suya) no hay nada de Quique González y no hay nada de generaciones más anteriores aún. A Fabián, sin embargo, es más fácil reconocerlo en la música de raíces americanas, más fácil ver en su música destellos de gente como R.Adams, Conor Orbest, Jeff Buckley o Nick Drake yéndonos un poco más atrás; y por ahí, es por donde se maneja este Después del Incendio y Otras Cosas Así.
El disco, que es un manual de pop bien hecho de principio a fin, empieza con mucho ánimo con el buen rollo que da escuchar Piedras, una canción de ritmo alegre que sirve como preludio a la primera joya del disco: La Huida. La canción escogida como "single" (o avance del disco, sería más propio decir) es una auténtica maravilla, sin miedo a equivocarme es una de las mejores canciones que ha compuesto el leonés, y eso para quien conozca su cancionero es mucho decir. La canción transcurre en un continuo recitar de Fabián sobre una base rítmica que lleva la canción hasta un crescendo de una intensidad increíble que nos hace levantar los pies del suelo y llevarnos lejos de aquí. Y es que es ahí donde radica lo mejor de la música de Fabián, que sin darte cuenta consigue abstraerte tanto, consigue ensimismarte tan profundamente en ella que uno parece perder el contacto con la realidad durante el tiempo que dura la música. Esta sensación tan preciosa se sigue manteniendo a lo largo de todo el álbum, teniendo momentos fabulosos como Diecisiete recreación de como sería su vida junto a una camarera de la que se enamoró, Nieve en el Tejado con una de las mejores letras del disco, es otra canción muy en la línea de La Huída, que nos recuerda a unos Wilco que se hubieran olvidado de enchufar sus guitarras eléctricas pero que nos transmite la misma intensidad que el grupo americano. Oh Tú, es otro fantástico tema creado como una evolución de la canción que le precede (Oh María) pero en clave instrumental, una gozada sin duda. Llegado a este punto debería de nombrar todas las canciones porque todas puntúan con una nota muy alta, pero no puedo dejar de destacar la que le da título al disco Después del Incendio, una canción sencilla, de letra frágil y de belleza increíble. El álbum acaba con La Primera Canción, que es algo así como si pulsáramos el botón de “repetir todas” en el reproductor, ya que nos invita a volver a escuchar una y otra vez el disco en un continuo bucle.
En definitiva un trabajo precioso, hecho con mucho mimo, con una producción (autoproducción) excelente, que a veces es sencillo en cuanto a la instrumentación pero que logra tener momentos de una intensidad únicos. Imprescindible.
martes, 8 de marzo de 2011
Como el Vino Agrio
lo hago tan mal
tan gilipollas
tan jodidamente mal
tan engreído
tan rematadamente mal
tan injusto con ella
que pienso que sí
que definitivamente tengo algo de poeta
viernes, 4 de marzo de 2011
Poetry is not Dead
y es como si me faltara el aire,
mi reloj hiperventila constantemente
y me recuerda que cada vez queda menos
que cada vez todo está más perdido
Y es en estos días en los que ayer yo me hacía más pequeño,
me quedaba down in a hole
pero ahora la eterna sonrisa
con que me vestiste, un día de iniestas, carboneros y besos
me salva de todo
Y es en estos días, extraños, de 22 horas y 120 minutos
de nubes que no saben si van o si vienen,
pero nos dejan sus lamentos a su paso
es en estos días cuando también me refugio en la letras
en las de los demás, en las de las grandes obras
y es en estos días cuando siento vuestras palabras como si fueran mías
me enorgullece el poder de leer vuestra poesía
y es en estos días cuando descuido mis obligaciones
para sumergirme en tanta y tanta palabra
y descubro que los críticos son unos hijosdeputa
y los poetas ¿de ahora? unos envidiosos anónimos
que se disfrazan de críticos ¿o era al revés?
para escupir sus mentiras y mediocridad y conseguir
que a veces esto,
me de asco.
La poesía no está muerta, aunque esté llena de asesinos con delirios de grandeza; yo escribo en vertical porque horizontal me da vértigo, como vuestra infinita absurdez.
Me encantó esta portada y me pareció mezquina e interesada esta crítica.