Con esta frase, perteneciente a la canción Jews for Jesus Blues, conocí a Clem Snide. El caso es que leí la frase en una revista, haciendo referencia a esta banda americana, y me puse a buscar música por todos lados. Al poco de dejarme caer en su disco End of Love, donde se encuentra Jews f

Pero...¡la cosa no acaba ahí! Eef Barzelay, auténtico motor del grupo, se separó de sus chicos para sacar un par de discos en solitario (todavía no catados por mí) y volvió a juntarlos en 2009 para publicar Hungry Bird otra maravilla. Pero la cosa no sólo funciona hacia adelante, prueba a echarle una oída a A Beautiful E.P. (2003) que es otro gustazo (el ritmo de Happy Birthay me mata), o a The Ghost of Fashion considerado su mejor disco.
Todo lo que he tocado de este grupo me ha gustado, música suave a veces, dura las menos, pero siempre con una sensibilidad, y un cuidado tanto en la música como en las letras que te absorberá para siempre.
End of Love en Spotify